Si me hubieran preguntado 3 años atrás si alguna vez sería vegetariana/vegana mi respuesta hubiera sido "¡Jamás! ¿Cómo se te ocurre?", de hecho probablemente hubiera reclamado contra los activistas y cómo sentía que te estaban intentando "convertir". Pero aquí estoy, 3 años después, siendo una persona completamente distinta y "convertida" en algo que nunca pensé llegaría a ser.

Es chistoso como llegué a este punto la verdad, yo, quién siempre se ha quejado de las etiquetas que le damos a la gente, de hecho esa es una de las razones por las que tanto me costó llegar al punto en el que la palabra "vegana" fuera una forma de definirme.

Creo que mi mayor problema es la gente, lamentablemente, y es algo que he intentado cambiar con los años, lo que otros piensen de mi siempre me ha afectado de maneras en que no me gustan, pero dar este paso ha sido un gran trampolín para mi. No pretendo que todos entiendan mis decisiones, y tampoco pretendo cambiar a nadie, lo que si pretendo es entregar mi pequeño granito de arena para un mundo mejor.

La gente que me conoce sabe dos cosas. Uno: para mi todos los detalles cuentan y dos, siempre he creído que las "buenas modas" se deben seguir, ¿por qué no? La moda de leer, la moda de la ortografía, la moda del ser vegetariano/vegano/animalista, ¿cuál es el problema con seguir tendencias que no son dañinas? (en muchas de ellas, todo lo contrario)

En cuanto a mi cambio, pasé de ser vegetariana, a vegetariana estricta a vegana, y no hay momento en que me arrepienta. Nueva York me dio un empujón en este último paso y sin duda fue la facilidad de esta ciudad la que me dio las herramientas para dejar de buscar excusas (creanme, buscar excusas es la forma más fácil de no hacer lo que quieres o tienes planeado) e ir por ello. Estoy en transición no por mi comida, si no porque hay muchas más cosas a mi alrededor, y probablemente nunca logre ser una vegana al 100% (hay MUCHAS cosas de nuestro uso diario que calificarían bajo lo no-vegano), pero déjenme decirles algo: ser vegano/a no se trata de tratar de ser perfecto o mejor que el otro. 

Ser vegano va a ser distinto para cada persona. Aunque existan millones de libros, recetas, videos en internet, etc., cada persona es distinta. Por esta razón es que en este viaje he aprendido algunas cosas que quiero compartir con ustedes:

1. Cada uno va a su propio paso: No hay que esforzarse por algo, si no estamos comprometidos al 1000%. No sacamos nada con pasar al siguiente nivel, si no tenemos la conciencia del porqué estamos haciendo esto. No hay porqué apurarse, ni tampoco lamentarse. El tiempo siempre es el mejor aliado.

2. Siempre encontrarás veganos (violentamente) activistas: No hablo de los que suben fotos o videos, o los que van a ferias veganas, si no de aquellos que apuntan con el dedo a los vegetarianos o que simplemente, en vez de enseñarte de forma amigable que ser vegano NO es difícil, te tratan de forma arrogante y agresiva. No estoy a favor de la violencia, y para mi un vegano/activista violento está peleando violencia con más violencia y eso simplemente (para mi) no está bien. ¿Mi consejo? Ignorar. Una vez más, cada uno va a su propio paso.

3. No todo lo que ves en internet funciona para ti: No sé cuantas tipos de dieta* veganas hay, pero si sé de unas cuantas: HCLF (Altos carbos, bajas grasas), Crudi-vegano, RawTill4 (Crudo hasta las 4), entre otras. Pero, ESTAS DIETAS NO SIEMPRE VAN A FUNCIONAR EN TI (especialmente si estás usándolas para bajar de peso). Debes estar consciente que tu cuerpo y metabolismo, no es el mismo que el de otra persona, y aunque si puedas llevar una dieta así, siempre hay que conocer nuestro cuerpo y qué es lo que necesita.

*Hablo de dieta porque estoy hablando exclusivamente de la comida.

4. No necesitas todos esos super-food ni que todos tus alimentos sean orgánicos: Aunque comprar frutillas orgánicas, probablemente sea mucho mejor para tu cuerpo, no te castigues si no te pueden comprar esa "chia", "maqui", "super-food"... no la necesitas. Si vas a decidir seguir cualquier dieta, anda a un nutricionista e infórmate. Conoce tu cuerpo y tu metabolismo, y ten en cuenta que para llevar esta dieta de forma sana, sí necesitas estar consciente de cuánto y qué estás comiendo.

5. Todos los detalles cuentan: Hay gente que parte de a poco. Lamentablemente, no todos podemos ser veganos de la noche a la mañana, y hay infinitas razones para ello. Así también, creer en un mundo solo de veganos es bastante utópico, pero no por ello, no podemos seguir soñando y pensar que más y más gente se unirán a la causa.

Hay muchas más cosas que me gustaría decir, pero la verdad es que se me traban las palabras. Una, porque no llevo tanto tiempo, y dos, porque siempre he creído que esta decisión es bastante personal, y aunque yo les muestre lo fácil, rico, saludable, nutritivo y libre de crueldad que es, es cada uno quien toma la decisión de cambiar.

Como última cosa: Sí, acá en Nueva York es infinitamente más fácil salir a comer afuera como vegano, pero eso no significa que sea imposible hacerlo en otros lugares. Una de las cosas que aprendí es que tenemos que dejar de buscar excusas por todo lo que no-hacemos.

Esta es la entrada de hoy, todavía estoy peleando con el hecho de decir que soy vegana, no porque me da vergüenza, si no porque siempre he sido reacia a etiquetarme y etiquetar a la gente, pero he descubierto que esta es una buena etiqueta y no tengo porqué sentirme mal por ello. Todavía tengo que cambiar algunas cosas de maquillaje (que son cruelty-free, pero no veganas) y mi perfume, que creo va a ser mi dolor forever, pero estoy feliz, contenta y disfrutando de la infinidad de oportunidades de esta ciudad.

Esperen cuando vuelva a Chile, tengo muchos planes!

Un abrazo y nos leemos la próxima entrada! :)